Caminamos Contigo nació al albor de una necesidad creciente en la búsqueda de hacer el Camino de Santiago de otra forma, sin renunciar a la esencia de las peregrinaciones, pero dotado de determinadas comodidades.

La idea me sobrevino en un programa de radio, estaba invitado a participar en un coloquio, alejado de temas peregrinos y del propio Camino, pero como raramente me puedo olvidar del Camino, dada mi pasión por él, pues saqué a la palestra el tema del Camino, y me sorprendió oír, tanto del locutor, como de varios de los técnicos de sonido de la emisora, que ellos deseaban hacer el Camino de Santiago, les echaba para atrás la idea de cómo pensaban ellos que era, no querían compartir habitaciones, no deseaban ir a albergues al uso, ni tampoco querían compartir baños, reclamaban una determinada intimidad y comodidad, una vez acabada su etapa, entonces pensé que por qué no??,

Recordé ese poema del S XIII, que algunas veces leí en el antiguo Hospital de Roncesvalles, al pie del Camino de Santiago, y que venía a decir algo así como;

“La puerta se abre a todos, enfermos y sanos, no solo a católicos, sino aún a paganos, a judíos, herejes, ociosos y vanos; y más brevemente a buenos y profanos.”

Empresas que organizan el Camino de Santiago

Conocía la existencia de otras empresas, pocas eso sí, que se dedicaban a realizar Caminos de Santiago organizados, pero que no fue hándicap para no poner en marcha la idea que de ese programa me nació. Montar una empresa que pudiera organizar Caminos de Santiago, ofreciendo todas las necesidades que echaban para atrás a personas que querían hacer el Camino de una forma más cómoda y sin renunciar a la espiritualidad que la Ruta Sagrada ofrecía.

Puestos a trabajar en ello, la andadura de Caminamos Contigo empezó a desarrollarse, primero preparando caminos, en estos cinco años de experiencia hemos preparado y dejado satisfechos a cientos de clientes, clientes a los que hemos convertido en peregrinos y que todos tienen en mente repetir, algunos, muchos de ellos ya lo han hecho; repetir, cogimos bagaje y experiencia que nos vino implementada por la experiencia propia en el Camino, pues sin duda el hecho de llevar caminando desde el año 93, sin duda nos daba una posición de conocimiento que nos permitía hacerlo fácil.

Con el paso del tiempo diversificamos nuestra presencia, empresarialmente hablando, en el Camino de Santiago, con la apertura de 2 alojamientos, pensados por y para los peregrinos, uno en el Camino Inglés, más concretamente en Pontedeume, un establecimiento con 45 habitaciones, todas ellas con baño privado, habitaciones dobles e individuales, en una finca con un marco incomparable, frente a la Ría de Pontedeume, todo un remanso de paz para los caminantes que allí se hospedan, rodeado de un inmenso jardín propio que es sencillamente un oasis en el Camino Inglés. Posteriormente abrimos otro establecimiento, en el Camino Francés, en el mismo Camino, en la localidad de San Xulián do Camiño, junto a Palas de Rei, donde el peregrino encuentra un verdadero espacio peregrino, brindándole un sitio de enorme belleza, junto a una de las “corredoiras” más bellas del Camino Francés, así está reconocida, donde poder pernoctar, desayunar, comer y cenar, todo con unos precios completamente asequibles.

Camino de Santiago Organizado

La preparación de Caminos organizados y la apertura de los dos alojamientos nos daban una reconocida presencia en el Camino de Santiago y nos exigía estar a la altura, y trabajamos para ello, queremos ser un referente en el Camino de Santiago para los peregrinos.

La pandemia sanitaria nos ha conllevado a tener que cerrar los establecimientos en distintas ocasiones y siempre por mor de las normativas sacadas al efecto, así como tener que suspender la preparación de Caminos, pues nos encontrábamos con el Camino cerrado y la imposición de tener que cerrar los establecimientos por la normativa sanitaria.

Pero lejos de pararnos, nos reinventamos y relanzamos en nuestros propósitos, aprovechando la coyuntura de inestabilidad que la pandemia ha conllevado y sacando ideas sobrevenidas al aire de los obligados cierres y suspensos de la actividad, aprovechando la situación para salir más fuertes y con más ganas de servir al peregrino del Camino de Santiago.